La cuenta atrás ha comenzado. 10 días. Ese es el número exacto de jornadas que faltan para el arranque de la 112ª edición del Tour de Francia. Siete etapas llanas, seis de media montaña, seis de alta montaña y dos contrarrelojes conformarán el recorrido de una edición que promete ser una de las más reñidas de los últimos años. A menos de dos semanas para la Grand Départ de Lille, los corredores ultiman su preparación a más de 2.000 metros de altitud en sus respectivas concentraciones en altura. Uno de ellos es Tadej Pogacar. En Isola 2000, el esloveno busca alcanzar su punto de forma óptimo para afrontar la defensa del amarillo que comenzará el próximo 5 de julio.
En vísperas de la Grande Boucle, Joxean Fernández “Matxin”, mánager general del UAE Team Emirates – XRG, habla con El Farolillo Rojo sobre el Tour de Francia y el estado de forma de un Tadej Pogacar que buscará su cuarto maillot amarillo.

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– ¿Cómo afronta el equipo el Tour de Francia?
El equipo y la estructura están bien. El grupo del Tour está perfectamente coordinado en los entrenamientos en altura y todo se está desarrollando en la línea que teníamos prevista.
– ¿Cómo se encuentra Tadej Pogacar?
Bien, la verdad es que está bien.
– Se ha llegado a comentar que la preparación de Tadej Pogacar no ha sido la óptima debido a su campaña de clásicas. Dentro del equipo, ¿lo veis así?
No. De hecho, ha tenido menos días de competición y está en una situación excelente. Tanto los resultados como los números así lo dicen. Entiendo las opiniones, pero nosotros tomamos la decisión con la información y los números que manejamos. Desde esa base, y con el estudio de las carreras, los rivales, el equipo y las necesidades, hacemos una preparación ad hoc para los objetivos que tenemos.
– El equipo está concentrado en Isola 2000. ¿Qué se trabaja y en qué os focalizáis en esta última concentración?
Hoy en día lo que hacemos es delegar todo en el equipo de profesionales que tenemos, quizá es una pregunta más para el área de performance. Ahora mismo, todo el trabajo generalizado está hecho. Precisamente, en Dauphiné hemos competido para ver ese trabajo generalizado que habíamos realizado. En esta última concentración nos enfocamos en el trabajo específico, como intervalos y cosas mucho más técnicas a nivel de preparación para afrontar el Tour de Francia en las mejores condiciones posibles. Sabemos que este año las primeras etapas no son de montaña y son complejas. Hasta la contrarreloj de la quinta jornada, serán días muy tensos y nerviosos.
– ¿Habéis podido reconocer etapas?
Sí, obviamente. En los Pirineos no, pero en todas las etapas de los Alpes hemos hecho el reconocimiento. Las dos contrarrelojes también las hemos visto.
– Tadej hizo énfasis en que tenía que mejorar sobre la bicicleta de contrarreloj. ¿Está focalizándose mucho en ello en esta concentración?
Yo creo que en las contrarrelojes lo está haciendo bien. Lo que ocurre es que sí hay ciertas cosas que queremos modificar o que se tienen que cambiar. En la crono de Dauphiné aprendimos cuáles son esas cosas en las que tenemos que mejorar. Pero está claro que la exigencia y lo que se le pide a un corredor que es el mejor del mundo es que esté en todas las carreras siendo el mejor del mundo. También hay que reconocer que los rivales son buenos y que hacen las cosas muy bien, como las hicieron Remco y Jonas. Somos conscientes de que tenemos que mejorar, y sabemos cómo y dónde tenemos que hacerlo, eso ha sido lo más importante que hemos aprendido del Dauphiné.
– ¿Fue un día malo de Tadej o simplemente no estuvo al mismo nivel que sus rivales?
No, no diría eso. Muchas veces cuando alguien pierde es importante darle el beneficio al que gana, que también lo hace bien. No es quitar mérito a lo que han hecho los rivales, todo lo contrario. Yo creo que a los adversarios hay que valorarlos, Remco es campeón olímpico y del mundo, lo que hace que tenga un dominio de la especialidad que está contrastado. Ese día fue mejor y hay que valorar a la gente que te gana.
– Con respecto al año pasado, el único cambio en el equipo del Tour será la entrada de Narváez en lugar de Ayuso. ¿Qué puede aportar Jhonatan y qué papel tendrá en la carrera?
Exceptuando a Tadej Pogacar, Narváez es uno de los mejores puncheurs del mundo. En las primeras nueve jornadas, incluida la del Mûr-de-Bretagne, nos dará posicionamiento, estabilidad en etapas en las que se maneja muy bien y ese último punch que tiene Jhony que le hace ser un killer.
– A nivel de sensaciones, Pogacar no tuvo rival en Dauphiné. ¿Creéis que Vingegaard estará a su nivel en las jornadas decisivas?
Lo que está claro es que no se pueden comparar ni carreras ni estados de forma. Este Tour de Francia es muy atípico, donde, en nueve etapas, habrá que pasar mucha tensión y mucho nerviosismo, ya ves cómo está la situación con las caídas ahora mismo. Hasta la décima etapa hay nueve jornadas en las que habrá una tensión máxima. Por eso, creo que aquí no se trata tanto de cómo llegará Jonas a la última semana, sino de cuáles serán las circunstancias en esas nueve etapas antes de alcanzar la montaña.

Imagen vía: UAE Team Emirates – XRG
– ¿Qué ocurrió en el descenso de la Croix de Fer?
Si te digo la verdad, no hemos hablado de ese tema. Ni con él, ni con sus compañeros y tampoco con los directores. Yo también vi ese comentario, pero no entramos en detalle como para darte una información de qué ocurrió exactamente. Realmente me extrañó, porque Tadej suele ser una persona muy respetuosa y nunca entra en estas situaciones. Pero bueno, cuando vas a 200 pulsaciones, a veces te quedas con ese concepto de lo que ha pasado y de lo que posiblemente no te ha gustado. No tengo una información al respecto, así que no te puedo decir nada. Lo que sí que entiendo es que, cuando Visma vio que no podían arrancar para arriba, decidieron arrancar para abajo, con el riesgo que ello conlleva. Esos riesgos a veces son medidos y otras veces no tanto.
– ¿En qué ha mejorado Tadej Pogacar respecto al Tour de Francia 2024?
En todo, Tadej mejora cada año. Obviamente, cuando alguien ya está al 99%, cualquier mejora, aunque sea de un 0,5%, marca la diferencia. Por eso Tadej no deja de evolucionar. Mejora en que no es un campeón, es un líder, con todo lo que la palabra conlleva. Un líder lo primero que hace es ayudar a que sus compañeros, el staff y todo el mundo sea mejor. Lo que él demanda para sí mismo también lo demanda para sus compañeros. Eso es algo que dentro del equipo lo valoramos y lo agradecemos, porque cada vez intentamos ser mejores. Cuando eres el mejor ciclista y equipo del mundo te das cuenta de que lo difícil no es conseguirlo, sino mantenerlo.
– Este año el Tour de Francia comienza con etapas muy nerviosas. ¿Cuál es el objetivo en estas jornadas?
Es triste decirlo, pero el objetivo es que no pase nada. Yo cuando vi el recorrido, sin ser ninguna crítica, me di cuenta de que, al observar el área de seguridad y otras medidas que han implementado, hay más formas, y muy fáciles, para saber que si hay opciones para 200 corredores todos van a querer estar ahí en los últimos kilómetros. Cuando tú vas en una carretera de 10 metros y pasas a una de 4, no entran todos los ciclistas. No es algo que tenga que ver con que haya 22 o 23 equipos, es una cuestión de que en una carretera de 2 metros no entran 12 corredores. No hace falta hacer ningún estudio ni sacar conclusiones para saberlo. Si tú pones una contrarreloj o una etapa más selectiva limitas que haya menos líderes, por lo que hay menos equipos, menos corredores, menos tensión y, por lo tanto, menos caídas.
– ¿Cuáles consideráis que serán las etapas claves de la edición?
Está claro que hay muchísimas etapas. Somos conscientes y hemos hecho un plan en referencia al Tour de Francia, pero al final sabemos que hay etapas clave. En la primera semana, la crono y la décima etapa, que es la primera de montaña, son importantes. En la segunda semana, tenemos la etapa 12 de Hautacam, la 13 con la cronoescalada y la etapa 14 con llegada a Luchon-Superbagnères. Esas tres etapas serán super importantes. En la última semana habrá otras tres etapas: la del Mont Ventoux, que será la primera después del día de descanso y una jornada clave; y las de Courchevel y La Plagne, que también serán decisivas y marcarán el Tour de Francia.
– En la cronoescalada, ¿saldréis con la cabra o directamente con la de ruta?
Hemos probado con la cabra, con la bicicleta ligera y con el manillar convencional. Tomaremos la decisión, pero tenemos todo listo.
– Se espera mucho calor en Francia este verano. ¿Ha mejorado Tadej su resistencia a las altas temperaturas?
Si analizamos que ha corrido cinco Tours de Francia y ha hecho 1º, 1º, 2º, 2º y 1º, está claro que se adapta bastante bien al calor francés (risas). Pero esto es como todo, las cosas extremas se sufren, aunque hemos implementado protocolos de enfriamiento para mantener una buena temperatura corporal. En lo que sí que no estoy tan de acuerdo es en limitar la presencia de auxiliares o de puntos en los que se pueda dar agua, porque con calor extremo prohibir tomar agua me parece algo irreal. No sé si la idea es que la gente se deshidrate, sufra o coja pájaras, pero el prohibir dar agua no me parece una decisión correcta.
– Richard Plugge comentó que en tres semanas Vingegaard será mejor. ¿Crees que se infravalora la capacidad de Pogacar con respecto a Jonas en el Tour de Francia?
Al final son opiniones. Lo que está claro es que en cinco Tours no ha bajado de la segunda posición y ha ganado tres. No creo que haya más valoración respecto a su capacidad como hombre Tour (risas).
– Almeida se ha mostrado intratable en Suiza. ¿Os planteáis el podio del Tour como un objetivo real?
Nunca ponemos límites al campo. Pero tampoco queremos ser presuntuosos en nuestras ambiciones ni planteamientos. Lo que está claro es que la carretera tiene que poner a cada uno en su sitio y Joao ahora está en una condición muy buena, lo viene demostrando a lo largo de todo el año. Para nosotros, tener corredores como Yates y Almeida es un valor asegurado en montaña y vamos a intentar que sean importantes para Tadej Pogacar, para el equipo y para ellos mismos.
– ¿Cómo está Adam Yates tras el Giro de Italia?
Cuando tú sales al Giro de Italia con la intención de hacerlo bien y no te sale como esperabas, no cumples las expectativas que tú mismo generas. Adam es siempre uno de los corredores más honestos que podemos tener en cuanto a fiabilidad, compromiso, actitud y calidad. Incluso no estando al 100%, es capaz de estar con los mejores del mundo y eso para nosotros es una garantía absoluta.
– La última. Un deseo para este Tour de Francia
Ganarlo.