La Vuelta a España ha llegado a su primer día de descanso este lunes. Tras nueve etapas, los ciclistas afrontan esta jornada de pausa después de una semana en la que partieron desde Italia, pasaron por Francia y finalmente entraron en territorio español.
En esta primera parte de la carrera, la montaña apareció de manera puntual, pero sin grandes dificultades. A partir de la segunda semana, sin embargo, será la gran protagonista y pondrá a prueba a los aspirantes al triunfo final.
De estos nueve días de competición se pueden extraer varias conclusiones. Estas son las nuestras.
Jasper Philipsen, el mejor sprinter de esta Vuelta

Vía: Alpecin-Deceuninck
Cuando el Alpecin-Deceuninck anunció la participación de Jasper Philipsen, todos sabíamos lo que significaba: iba a ser el hombre a batir en las llegadas masivas.
Así lo está demostrando. El belga suma ya dos victorias de etapa, se vistió de líder en la jornada inaugural y cuenta además con un segundo puesto (más por error de un compañero que por el suyo). En los sprints apenas encuentra oposición, ya que rivales como Vernon, Viviani o Coquard están lejos de su nivel.
Lo más llamativo es que Philipsen confesó no llegar en su mejor forma, y aun así le alcanza para dominar los embalajes. En principio todavía tendrá al menos dos oportunidades para ampliar su botín y quitarse el mal sabor de boca de su abandono en el Tour de Francia.
Jonas Vingegaard, principal favorito a la victoria final en la Vuelta

Vía: Visma | Lease a Bike
Pocas dudas había antes de la salida: Jonas Vingegaard era el gran candidato al título. Y lo está confirmando con autoridad.
El danés de Visma | Lease a Bike ya suma dos triunfos de etapa y ha demostrado que ha llegado con ambición y hambre de éxito, después de varios meses sin victorias. Y lo más significativo: la alta montaña aún no ha aparecido de verdad.
La segunda semana será decisiva para ampliar su ventaja sobre Joao Almeida y, por qué no, para seguir sumando etapas.
UAE Emirates: un equipo difícil de descifrar

Vía: UAE Team Emirates
El UAE Team Emirates muestra dos caras a lo largo de la temporada. Con Tadej Pogacar en la alineación, el bloque funciona como una máquina perfecta: orden, control y victorias. Sin él, pese a contar con líderes potenciales en cualquier otro equipo, reina el desorden y prevalece el interés individual.
Eso mismo está sucediendo en esta Vuelta, como ya ocurrió en el pasado Giro. El conjunto acumula tres victorias de etapa y mantiene a Joao Almeida en la segunda plaza de la general, pero la sensación interna es de falta de cohesión.
Ayuso, ganador en Cerler pero ya sin opciones en la general, parece más centrado en objetivos personales que en ayudar al equipo. Tras su triunfo, incluso han surgido rumores de un posible fichaje por Lidl-Trek.
Por su parte, Almeida se quejó públicamente de haber quedado aislado en Valdezcaray, donde cedió tiempo frente a Vingegaard. Habrá que ver cómo evoluciona esta situación y si el portugués logra mantener vivas sus opciones de triunfo final.
Movistar Team: desorientados en su nuevo rol
La ausencia de Enric Mas obligó al Movistar a replantear su estrategia. Sin un líder para la clasificación general, el equipo apostó por buscar triunfos parciales. Sin embargo, la primera semana ha cerrado sin ninguna victoria.
Orluis Aular ha sido el más combativo, colándose en los sprints y logrando un meritorio tercer puesto en la jornada inaugural. Pablo Castrillo también lo ha intentado, aunque sin éxito.
El equipo sí mostró un buen rendimiento en la contrarreloj por equipos, terminando sexto y confirmando su progresión en esta disciplina.
Las dos semanas restantes parecen más propicias para intentarlo de nuevo, aunque no será fácil. Pese a todo, seguro que Movistar seguirá buscando ese triunfo que se les resiste.